La falta de lluvias y las temperaturas elevadas no sólo tiene consecuencias con el nivel de almacenamiento del agua del pantano, también hacen que la temperatura del agua embalsada se incremente y en consecuencia se crean las condiciones adecuadas para que proliferen organismos acuáticos como son las algas.
Este fenómeno se está dando en el pantano de Barrendiola donde puede observarse la aparición de unas manchas, que pueden ser de diferentes colores y que, en el caso de Barrendiola, son de color pardo-verduzco en su superficie, y gracias al viento sur de estos días se han concentrado en una de sus esquinas.
Desde Gipuzkoako Urak informan, que durante todo el año se monitoriza la proliferación de estas algas en todas las presas que las gestionan, siendo comunes episodios de este tipo, por lo que no existe peligro alguno para el agua que llega a los domicilios.
La proliferación de este tipo de algas es habitual que se produzca, en los pantanos de zonas cálidas, durante los meses estiaje.
Hasta este año, pocas veces habíamos podido observar este fenómeno con esta magnitud en el pantano de Barrendiola, lo que muestra los efectos que ya está generando el cambio climático en nuestro entorno más cercano.