El 4 de agosto del año 2016 se observó la mortandad de peces en el río Urola, por lo que se activó el protocolo de actuación correspondiente.
Tras inspeccionar el río Urola, se identificó como causa probable un pequeño vertido de agua de la piscina del polideportivo al río Urola. El agua clorada procedía de una canaleta nueva para la recogida del agua de la zona de bancos, construida en la obra de mejora de la piscina.
Las medidas correctivas adoptadas contemplaron al sellado inmediato de la fuga y como medidas preventivas se derivó el vertido de esta canaleta nueva de la piscina al colector, informando de todo ello a Diputación y URA de Gobierno Vasco.
La mortandad de peces es una infracción administrativa muy grave y como tal ha sido sancionado el Ayuntamiento con 602 euros y un importe de indemnización de los daños y perjuicios causados en el río Urola de otros 360 euros.
El Ayuntamiento de Legazpi ha aplicado el principio de “quien contamina paga” reconociendo el daño causado y abonando la sanción impuesta.